Vamos a ampliar los conocimientos sobre la Elíptica Evolutiva. Abarcaremos desde el nacimiento de las “Simientes Divinas”, seres embrionarios, hasta la reintegración a la Divinidad de la cual nacimos.
Nacemos como un conjunto de chispas brillantes, es decir nacemos en oleadas, en grupos, hermanadas en ese nacimiento y ni bien nacemos quedamos bajo la protección de todas las Leyes Divinas; Ley del Amor, Ley de Evolución, Ley de Afinidad, Ley de Karma o Causa y Efecto, Ley de Jerarquía, Ley de Reencarnaciones, Ley de Equilibrio Universal, y comenzamos a recorrer la Elíptica Evolutiva.
Nacemos de la Mente Divina por lo tanto somos mente pura, una mente sin desarrollo aún. El desarrollo lo lograremos a través del recorrido de la elíptica evolutiva.
Esas oleadas de seres que “nacen” se ubican en determinados sectores del universo, en determinadas galaxias, sistemas y soles, de acuerdo a la “calidad” vibratoria con que nacen. Esa calidad vibratoria esta dada por el impulso de nacimiento que es el que los ubica donde corresponde.
Como ejemplo podemos hacer lo siguiente: tomemos unas cuantas bolitas en nuestra mano y arrojémoslas sobre una superficie; observaremos que cada una de ellas se ubica en un lugar distinto de esa superficie, unas más cerca, otras más lejos. Que hace la diferencia? el impulso de la acción de arrojar. Ese impulso tiene distintas respuestas de las bolitas, así también el impulso de nacimiento tiene distintos resultados en el grupo de seres embrionarios que nacen ubicándose, en grupos, en distintos sectores del universo.
Ese impulso marca una impronta en el ser que es lo que determina su calidad vibratoria.
Esa diferencia de sector hace que los seres pasen por distintas experiencias de acuerdo a los medios que presenta cada sector, pero como la Divinidad es justicia, esas experiencias son totalmente equivalentes, es decir no representa ninguna prerrogativa para los seres de acuerdo al sector que les tocó.
Esos seres embrionarios comienzan sus experiencias con el objeto de desarrollar todo el potencial Espiritual que tienen por su nacimiento de la Divinidad, sus Facultades y Poderes, en planos muy sutiles, donde no existen las formas, solo vibraciones.
Son planos físicos invisibles que contienen las vibraciones básicas físicas invisibles que luego van a conformar los medios de experiencia que corresponda en los planos de formas físicas visibles de cada mundo. En el caso de nuestro planeta las vibraciones básicas físicas invisibles son las que corresponden a los reinos de la naturaleza, mineral, vegetal y animal, y en otros mundos será lo que corresponda pero siempre en equivalencia.
Entonces toman contacto con esas vibraciones básicas muy sutiles y van incorporando esos conocimientos, esas sensaciones. Esa incorporación hace que vallan avanzando en su evolución, por lo tanto avanzan de plano en plano cada vez menos sutiles hasta llegar al plano de las formas como es al que pertenece nuestro mundo.
Recordemos que hablamos de nuestro planeta pues es la única referencia que tenemos.
Las vibraciones van a componer los medios de experiencias que correspondan a cada planeta en el universo todo.
Esta parte de la Elíptica Evolutiva es en descenso hacia los planos de forma; “Etapa Descendente” o “Etapa Densificadora”.
Como aquí en nuestro mundo conocemos la gran multiplicidad de formas cabe preguntarse si los seres en evolución pasan por cada una de esas formas.
Hablamos del Alma Grupal que era la que contenía a todos los seres en su estado de “embriones” y “semiconsciencia” hasta llegar al punto de evolución que le corresponda comenzar a experimentar con total conciencia de su existencia, de su individualidad, en el Reino Humano. Es un Alma Grupal que contiene a todos los seres que nacen hermanados en cada una de esas oleadas, en cada haz brillante es decir que habrá tantas Almas Grupales como grupos de nacimiento halla.
De esta manera no hace falta que los seres, “embriones divinos”, pasen por todas las formas dado que se comunican entre sí las experiencias. No hace falta que pasen por todos los minerales, ni todas las plantas, ni de todos los animales, pero sí el grupo debe pasar por todas las experiencias en los planos físicos visibles e invisibles.
En esos últimos momentos hacen experiencias en formas animales muy desarrolladas como ser los mamíferos, haciendo hincapié en la utilización de formas animales en contacto con el hombre, perros, gatos, caballos, etc.
Esto hace que debamos pensar que siempre debemos irradiar amor a todos los animales que se acercan a nosotros pues eso también sirve para sus experiencias.
Aun los animales desagradables o peligrosos para nuestra salud deben ser alejados de nosotros, pero debemos tener en cuenta que sentimiento ponemos en ello. Así, si tenemos que matar una cucaracha o una rata debemos pensar que deben seguir con su evolución y no poner en esa acción nuestra repulsión haciéndolo con saña. Son seres en una parte de su trayectoria.
No olvidemos que ese contacto con la vibración humana le sirve para el cambio de un ser “semiconsciente” a un ser de “conciencia plena” para no desconocer, aunque en forma rudimentaria, la vibración que luego van a utilizar en el Reino Humano.
Los animales no tienen cuerpos físicos invisibles básicos ni transitorios sino que después de cada experiencia retornan al Alma Grupal; una experiencia no guarda relación directa con la otra. Hay una necesidad del grupo de seres dentro de un determinado grupo o especie animal. Como no tienen conciencia de bien y de mal no conservan karma negativo ni superaciones logradas.
Cuando un espíritu debe ocupar un cuerpo animal se conforman unos cuerpos físicos invisibles comparables a los básicos pero con la sola finalidad del contacto de lo Espiritual con lo físico.
En los animales esos cuerpos invisibles no reciben karma ni superaciones como los reciben los cuerpos invisibles básicos de los seres humanos.
Cuando termina la vida animal ese aspecto de intermediación se disgrega.
El ser una vez lograda su conciencia de individualidad en forma rudimentaria, termina su experiencia en la última forma animal y una vez en el espacio crea su propia Alma Individual tomando del alma grupal todas las experiencias que se hallan en ella.
Además realiza en el espacio un análisis de cada experiencia y en la utilización de su Discernimiento y Libre Albedrío determina, de acuerdo a su propio punto evolutivo, que es “bien” y que es “mal” conformando así su “Conciencia de bien y de mal”.
Esta formación de la conciencia es la que le permite comenzar con sus experiencias como individuos en el Reino Humano.
Aquí debemos aclarar que las Leyes Divinas que nos rigen responden a nuestros errores de acuerdo con el punto evolutivo que hemos logrado y de acuerdo también a los conceptos de “bien” y de “mal” de nuestra propia conciencia espiritual. Cada experiencia realizada está en un todo de acuerdo a nuestra capacidad espiritual; si la experiencia fuera mas allá de ella no estaríamos en condiciones de superarla, aun poniendo toda nuestra voluntad, por lo tanto sería injusta. Las Leyes no permiten que nos lleguen experiencias para las cuales no estamos preparados. Eso no quiere decir que pasemos todas las experiencias, pues dependerá de la mayor o menor voluntad puesta en cada superación.
Cabe recordar que las leyes divinas harán que nos lleguen las experiencias tantas veces como sea necesario hasta que las superemos. Por supuesto que llegarán en el momento en que estemos preparados para sortear esa dificultad pero poniendo siempre al máximo nuestra voluntad
Otro concepto a tomar en cuenta es que ni bien nacemos de la Divinidad como “embrión divino” estamos protegidos y guiados en nuestras experiencias por mentes muy evolucionadas, por mentes que han logrado un punto tal de evolución y progreso espiritual que les permiten convertirse en guías.
En todos los momentos vividos, incluyendo las primeras encarnaciones humanas, estas “mentes guías” sugieren a las mentes que están experimentando cuales son las experiencias más convenientes. Se dice “sugieren” porque ninguna mente puede ejercer influencia directa sobre otra, excepto que el propio ser, mediante el uso de su voluntad y libre albedrío, abandone su aspecto mental a dicha influencia, permita ser “tomado” por esa otra mente. En realidad son casos muy raros y su solución es lo conocido como “exorcismo”.
Lo que si pueden hacer es fortalecer un pensamiento de otra mente pero solo cuando ésta vibra en afinidad. Solo puede tomar contacto una vibración con otra cuando hay una estrecha afinidad, es decir cuando ambas son negativas o ambas son positivas.
Cuando avanzamos en nuestra evolución llega un punto en que no necesitamos sugerencias para nuestras experiencias entonces esas mentes se convierten en nuestros “Guías Espirituales” y si somos capaces de elevarnos espiritualmente esas mentes nos guían, nos protegen, nos transmiten fuerzas y también sugerencias para nuestro mejor vivir.
Cada uno de nosotros tiene un guía protector que podemos o no conocer, de acuerdo a las necesidades de nuestras experiencias. Si por las experiencias a realizar corresponde que lo sepamos de alguna manera nos vamos a enterar.
Una vez llegado al punto evolutivo que comenzamos con las experiencias humanas, como hemos llegado a la máxima diversificación de nuestras vibraciones, entramos en la etapa “ascendente” o etapa de “sutilización”.
Esto significa que cuando estamos en la etapa descendente vamos rodeando a nuestra esencia divina, a nuestro aspecto mental, de las vibraciones que tomamos de cada plano para conformar nuestra alma.
Una vez comenzada la etapa de sutilizacion volvemos a pasar, ahora ascendiendo, por los mismos planos por los que hemos descendido, en pleno desarrollo de nuestras facultades y poderes, dejando entonces en cada uno de ellos las vibraciones que recogimos para conformar nuestra alma.
Esto quiere decir que al término de nuestra etapa de sutilización solo volveremos a ser mente pura ya que las vibraciones del alma son devueltas a cada plano, pero esa mente pura tiene ya desarrollado todo su potencial.
Una vez lograda la sutilización y eliminadas las vibraciones del alma en cada plano por el cual vamos ascendiendo pasamos al llegar al máximo de nuestra sutilización al Plano Divino como Mente Pura desarrollada comenzando la etapa de Reintegración.
Por lo dicho sabemos ahora que las etapas son tres: Descendente o “Densificadora”, Ascendente o “Sutilizadora” y de “Reintegración”.
Deseo aclarar un poco más sobre las “mentes guías”.
Las “mentes guías” que nos ayudan desde nuestro nacimiento espiritual como “chispas divinas” lo hacen a través de toda nuestra trayectoria hasta el punto en que no encarnamos mas.
Participan activamente en la preparación de las experiencias a realizar en nuestras primeras encarnaciones. A medida que nuestro ser se desarrolla esa participación va disminuyendo hasta que estamos preparados para elegir por nosotros mismos sin ayuda.
Aun en las etapas que ya no necesitamos ayuda para “planificar” nuestras experiencias participan sin influir pues su tarea de “mentes guías” sigue siendo necesaria cuando como encarnados estamos en los primeros años de nuestra vida y no podemos todavía aplicar nuestro discernimiento y libre albedrío. Esas “mentes” se encargan que en esas etapas nos llegue lo que corresponde a las experiencias “planificadas” de las cuales participaron solo como “oyentes”, es decir sin influir pero que al conocerlas les permite guiarnos en esas primeras etapas. Esas “mentes guías” purísimas son la mayoría de las veces detectadas por los niños en la temprana edad y se convierten en su compañero de juegos “invisible” al que los niños le ponen un nombre. En mi caso mi sobrina y mi segundo hijo que jugaban siempre juntos lo llamaban Paco. Se los sentía hablar y uno les preguntaba con quien estaban hablando o jugando y respondían “con Paco” como diciendo “no lo ves?”.
Ya habíamos visto que plano es un conjunto de puntos evolutivos en una escala determinada y que al finalizar un plano comienza otro más sutil, es decir que el conjunto de puntos evolutivos que abarca están por encima de los puntos evolutivos del plano anterior y así sucesivamente.
Profundizando este tema veremos como se ubican los planos desde la Divinidad hasta el plano que abarca a nuestro mundo.
Los planos de mayor sutileza donde solo se hallan seres que han comenzado la etapa de Reintegración en contacto con la Divinidad, son los Planos Divinos. En estos mismos planos es de donde nacen como haz de luz de chispas brillante los seres embrionarios o “simientes divinas”.
Esos seres embrionarios se ubican, en un comienzo, en los planos espirituales iniciales en su etapa de “simiente divina” y luego van avanzando en ellos como “semiconsciencia” o como “conciencia plena”, de acuerdo al punto evolutivo logrado a través de los logros de desarrollo de sus poderes y facultades en los planos de experiencias.
Luego vienen los planos físicos, planos de experiencias, que van desde lo físico invisible hasta lo físico visible donde se van manifestando las vibraciones que en los planos de forma constituyen los reinos de la naturaleza en esta parte del universo. Nos referimos siempre a lo que conocemos para desarrollar el conocimiento pero siempre debemos recordar que en otros lugares los medios de experiencia pueden ser totalmente distintos pero siempre en equivalencia.
Los planos físicos visibles e invisibles existen en todo el universo adaptado a cada tipo de experiencia que deben realizar los seres que pueden ser muy distintas de un planeta, sistema o galaxia a otra.
Con esto aclaramos que los planos físicos invisibles contienen las vibraciones físicas invisibles que luego en cada parte del universo van a conformar los medios de experiencia que corresponda. Va desde las vibraciones más sutiles, físicas invisibles, hasta las vibraciones de formas de los mundos que podríamos denominar vibraciones densas.
Debemos aclarar que hemos dicho vibraciones densas y no vibraciones negativas ya que el concepto es totalmente distinto. Una vibración puede ser negativa tanto sea sutil como densa. Su tónica de positiva o negativa no tiene que ver con su densidad.
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+ SUTIL
+ DENSO
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+ SUTIL
+ DENSO Planos Divinos
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+ SUTIL
+ DENSO
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+ SUTIL
+ DENSO
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+ SUTIL
+ DENSO Planos Espirituales
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+ SUTIL
+ DENSO
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+ SUTIL
+ DENSO
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+ SUTIL
+ DENSO
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+ SUTIL
+ DENSO Planos Físicos Invisibles
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+ SUTIL
+ DENSO
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(nuestro plantea y todo lo que vemos en el universo) Plano Físico de Forma
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En esta disposición veremos que la vibración más sutil de un plano, es inferior a la vibración más densa del plano inmediato superior. Además el dibujo es solo para ejemplificar, no significa para nada cantidad de planos ya que esa medida es desconocida.
Tampoco sabemos la cantidad de puntos evolutivos que hay dentro de un plano entre la vibración mas densa y la mas sutil
Ni bien el ser nace, “simiente divina”, se ubica en un plano espiritual y de allí, según ya hemos visto, hace su proyección a los Planos Físicos. De acuerdo al desarrollo logrado a través de las múltiples reencarnaciones, al finalizar completamente la experiencia cambia su punto evolutivo dentro del Plano Espiritual y así va avanzando cambiando de plano espiritual según corresponda, a través de ellos.
En un determinado momento llegaran (llegaremos) esos seres a los Planos Divinos de donde nacieron, es decir se habrán reintegrado a la Divinidad, en realidad recién comienzan su etapa de Reintegración.
Claro que para llegar a Planos Divinos hacen falta milenios y milenios de experiencias y no sabemos en que mundos ni en que parte del universo.
